EL VENTANO DEL DIABLO: miradores con las vistas más espectaculares de España

17 julio, 2014 at 8:28

Mirador Ventano del Diablo

El Ventano del Diablo es un mirador excavado en la roca desde el que podemos ver el río Júcar abriéndose paso por el valle. Su desnivel es de más de 200 metros, y forma una serie de maravillosos pozos donde se pueden observar los colores intensos que desprende el río en su reflejo sobre las rocas.

Se encuentra situado en el kilómetro 23 de la carretera que une Cuenca capital con la Serranía de Cuenca, la que pasa por Villalba de la Sierra.

Cuentan historias de brujas y conjuros sobre este lugar cuyas vistas son unas de las más impresionantes de la Sierra de Cuenca y se ha convertido en parada cómoda y casi obligatoria para todo el que se adentra en la Serranía.

ista desde Ventano_del_diablo

Su nombre proviene del lugar en el que el Diablo arrojaba al río a todos aquellos que se acercaban a mirar a través de los ventanales que forman los salientes de las rocas.

Estos parajes son conocidos por las hoces que forman los ríos Júcar, Huécar y Cuervo, que constituyen por sí mismas un espectáculo impresionante.

Desde el mirador se puede observar el valle de Villaba por un lado, de frente, la central hidroeléctrica del salto de Villaba, con los edificios del personal e ingenieros, al pie del mirador, y a nuestra derecha se extiende los bosques y montañas de la serranía.

El río Júcar esculpe aquí un profundo cañón por el que serpentea el agua del río, con conocidos parajes como los Cortados del Júcar, una sucesión de piscinas naturales de aguas azules y estrechos desfiladeros con aguas bravas. Sus aguas puras ofrecen uno de los escasos refugios de la península para el martín pescador y la nutria.

cortados del jucar

La visita es completamente gratuita y existen paneles explicativos en el lugar. No es difícil llegar y cuenta con un amplio aparcamiento (gratuito) para poder disfrutar de las maravillosas vistas de la Serranía de Cuenca sin prisas y observando bien cada lugar desde este mirador.

Hay un pequeño pueblo cerca del Ventano del Diablo que es Villalba de la Sierra. Las gentes del lugar se bañan en las inmediaciones, en el río Júcar, aunque se dice que el agua está helada. Desde allí abajo, a orillas del río, la vista en la altura del Ventano del Diablo es maravillosa. Es increíble como la naturaleza ha sido capaz de realizar esos dos ventanales en la roca, y sobre todo, qué lugar más preciso para realizarlos y poder tener unas vistas tan espectaculares.

ventano del diablo desde el Rio Jucar

La mayoría de personas visitan Ventano del Diablo cuando se dirigen camino a la Ciudad Encantada. En una curva del camino os daréis cuenta de que habéis llegado, pues siempre hay una multitud de coches aparcados en el recinto.

Cuenca - Ciudad Encantada

Desde la altura de 200 metros del mirador, podéis observar también al fondo el pueblo abandonado de El Salto de Villalba.

El paraje natural desafía a senderistas, escaladores y barranquistas y es también una estupenda atalaya para los aficionados a la ornitología, ofreciendo la posibilidad de observar tanto pequeñas avecillas de bosque, como grandes rapaces o carroñeros.

Os recomiendo bajar el río Júcar en kayac, en un precioso recorrido  a través de las curvas que realiza el curso del río. Los colores del agua son espectaculares.

rio jucar en kayac.


Cuevas con encanto: MINA ROMANA DE LAPIS SPECULARIS DE LA MORA ENCANTADA

31 marzo, 2014 at 20:13

MINA ROMANA DE LAPIS SPECULARIS DE LA MORA ENCANTADA

Desde esta mina, situada en la población de Torrejoncillo del Rey (Cuenca, Castilla la Mancha), se surtía de cristal de Hispania al Imperio Romano.

Esta antigua mina romana, se localiza en una pequeña elevación conocida con el nombre del cerro de «La Mora Encantada», un lugar cargado de leyendas, como la de la existencia de los tesoros y encantamientos de una Princesa Mora.

Fue redescubierta en el año 1953 por un vecino del pueblo que, en pos de las presuntas riquezas, excavó uno de los pozos romanos hasta alcanzar el interior subterráneo.

El minado es una explotación de yeso especular o selenítico en la que los romanos explotaron el famoso lapis specularis o cristal de Hispania, un yeso transparente de grandes cristales que en época romana se utilizaba a modo de cristal para ventanales y otros usos.

lapis specularis

Es uno de las cientos de minas descubiertas en la zona. Tiene más de mil metros de recorrido, con tres niveles de explotación. Hoy es posible sumergirse en la Historia adentrándonos en la profundidad de una mina con 2.000 años de antigüedad en la que salas y galerías, muestran las huellas de herramientas mineras junto a un universo geológico cristalino presente en las paredes y techos de esta espectacular cavidad.

En la actualidad y desde el 2003, la mina ha sido intervenida  arqueológicamente por el equipo del Proyecto Cien mil Pasos Alrededor de  Segóbriga que estudia la minería romana del lapis specularis. Los trabajos han  permitido una primera aproximación al minado, revelándose éste, por sus  características, como una de las minas más interesantes del distrito minero  romano de lapis specularis.

MINA ROMANA DE LAPIS SPECULARIS DE LA MORA ENCANTADA_2

La explotación de la mina se gestó mediante el método de cámara y  galerías, habitual en la minería antigua subterránea; cuenta con dos pozos de  extracción (uno de ellos de 25 metros), y con una entrada en pendiente con  escalones tallados a pico, que facilitaba tanto el acceso a la mina como a la  propia extracción del mineral.

POZO MINA ROMANA DE LAPIS SPECULARIS DE LA MORA ENCANTADA

La principal característica de la mina de la Mora Encantada en lo que  respecta a la investigación de la misma, estriba en la ventaja de la relativa  actualidad de su redescubrimiento, es decir, la mina desde época romana ha  permanecido oculta hasta que volvió a reabrirse a mediados del siglo XX, por lo  que, al contrario de la mayoría de minados del distrito minero, apenas ha  sufrido la injerencia del tiempo y de otras épocas, en donde las minas han sido  utilizadas como refugio, necrópolis, vertederos, etc.

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LA CIUDAD ENCANTADA; parques y reservas naturales

24 septiembre, 2013 at 9:44

CIUDAD ENCANTADA

La Ciudad Encantada es un paraje natural de formaciones rocosas calcáreas o calizas formadas a lo largo de miles de años. Se localiza cerca de Valdecabras, en el término municipal de Cuenca (España), en una amplia zona de pinares de la parte meridional de la serranía conquense y a una altitud de 1.500 metros. Está ubicada en una finca privada a la cual se puede acceder previo pago de 3€.

El tiempo que se tarda en recorrer la Ciudad Encantada está en torno a 3 horas para los más apasionados del Turismo Rural.

Fue declarada Sitio Natural de Interés Nacional el 11 de junio de 1929. Estos fenómenos geológicos, mundialmente conocidos, son formaciones rocosas literalmente esculpidas por la acción del agua, el viento y el hielo, que al erosionar durante siglos las rocas, ha conseguido modelar figuras humanas, objetos, animales, con una precisión difícil de entender, hasta conseguir una ciudad delirante, una ciudad que parece dormida de algún hechizo misterioso.

El entorno de la Ciudad Encantada también nos resulta mágico. La vegetación, espléndida, formada por quejigos, sabinas, enebros, boj, zarzamoras,… Los rebaños de ovejas pastan por los alrededores rompiendo el silencio con el sonido de sus esquilas, y en el aire siempre flota un perfume de romero, tomillo y mejorana ….

Comparte estas características especialmente con «Los Callejones», paraje ubicado en el término municipal de Las Majadas. Ambos lugares forman parte del Parque Natural Serranía de Cuenca.

 La Ciudad Encantada se sitúa en la Serranía de Cuenca la comarca mas húmeda de la provincia. Ésta es una comarca muy variada y de complicada topografía donde los ríos han labrado profundos valles que la fragmentan en una serie de mesetas «muelas» y cumbres más o menos planas, alternadas por profundos valles denominados «hoces» de increíble y sorprendente belleza, labrados por los ríos, Júcar, Escabas, Cuervo y Guadiela.

Si buscas un lugar original, la CIUDAD ENCANTADA es tu sitio. Además, está situado en plena naturaleza y visitarlo será un ejercicio de relajación perfecto. Si planeas un viaje a este lugar, puedes alojarte en las cabañas El Descansito, cerca de Cuenca, un alojamiento romántico e idóneo para la intimidad.

Llegando desde la ciudad de Cuenca, hay que coger la carretera que va a Tragacete, pasando por el mirador del «Ventano del Diablo», donde se puede disfrutar de una impresionante panorámica del río Júcar (recomendable parar). Continuando la carretera a 5 kilómetros está el desvío de Valdecabras, antes del cual se encuentra la Ciudad Encantada. Al salir de este extraordinario lugar, desde el aparcamiento, se puede recorrer una pista de unos dos kilómetros que lleva al Balcón de Uña, donde se contempla el río Júcar y la laguna de Uña.

FORMAS ROCOSAS MÁS REPRESENTATIVAS

Todas tienen un cartel que las define perfectamente.

El Tormo Alto. Monolito de 20 metros, milagro o juego de equilibrio, emblema de la Ciudad Encantada.

Los barcos. Tres enormes moles de piedra, una flota invencible anclada en la sierra.

El perro. Guardián de una ciudad petrificada, asemeja un fox terrier.

Cara del hombre. Monumental busto de nariz aguileña y boina.

Puente romano. Arco horadadazo en la roca, arquitectura natural.

La foca. Enorme figura imaginaria que representa una foca haciendo juegos malabares con su hocico.

Los Osos. Enormes pedruscos que recuerdan dos osos.

El tobogán. Estrecho y largo callejón rocoso de varios desniveles.

El mar de piedra. Plana y extensa superficie rocosa donde la erosión del agua creó formas que simulan olas y ondas marinas.

Lucha del Elefante y el Cocodrilo. Enormes y caprichosas rocas, asemejan la encarnizada lucha de un elefante que lanza su trompa a las fauces de un cocodrilo.

El Hipopótamo. Inmensa roca zooforma que recuerda un hipopótamo.

El Convento. Un arco ojival en una pared rocosa nos transporta a la edad media.

Los Hongos. Entre los pinos enormes bloques de piedra asemejan hongos gigantes.

El Teatro. En un escenario natural un curioso puente recuerda la embocadura de un teatro.

La Tortuga. La abertura en lo alto de una inmensa roca parece una tortuga con su cabeza fuera del caparazón.

Los Amantes de Teruel. Bloques de roca que parecen los bustos de un Hombre y una mujer intentando besarse.

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