El Parque Natural Sierra de Hornachuelos, situado en el sector occidental de la provincia de Córdoba, pertenece al macizo de Sierra Morena, así denominado por el color oscuro de sus materiales, compuestos fundamentalmente por pizarras.
La Sierra de Hornachuelos alberga una de las zonas de bosque mediterráneo y de ribera mejor conservadas de Sierra Morena. Junto al Parque Natural Sierra Norte de Sevilla y el Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche, conforma la Reserva de la Biosfera Dehesas de Sierra Morena.
Este reconocimiento se debe, en parte, a la gran diversidad biológica que alberga este espacio natural cordobés. Sus montañas, de relieves suaves, están colonizadas por bosques de encinas.
Pasear por sus parajes es algo increíble
Allí donde el suelo es de cuarcita y pizarra, en el paisaje aparecen profundos barrancos esculpidos por los principales ríos del Parque Natural: el Bembézar, el Retortillo y el Guadiato. Recorriendo el sendero del Guadalora (salpicado de alcornoques centenarios), se descubre el bosque de ribera que lo jalona, reino de especies como álamos, alisos, sauces y fresnos, junto con majuelos, hiedras y adelfas. Dentro del agua, destaca también la presencia de ranúnculos, lentejas de agua y otras especies acompañantes.
Pasear por sus senderos transporta a lugares llenos de encanto: saucedas, bellos embalses como el del río Bembézar, cañones, dehesas de cerdo ibérico, áreas de descorche tradicionales, caleras de piedra para elaborar cal quemando jaras. Y para los románticos, junto al abandonado Seminario de Los Ángeles aparece la Peña del Fraile, que inspiró la conocida obra del Duque de Rivas, «Don Álvaro y la fuerza del sino»; ambos hitos son visibles desde el sendero del Bembézar.
Entre su rica fauna destaca el lince, especie en peligro de extinción que presenta una distribución marginal. La sierra de Hornachuelos es un enclave natural de gran importancia donde es posible admirar paisajes serranos aún bien conservados en nuestra región.
Paseando por estas sendas es fácil la contemplación de rapaces, pues el Parque acoge una de las mayores colonias de buitre negro de Andalucía, además de una importante población de buitre leonado. Águilas reales, imperiales y perdiceras así como cigüeñas negras también anidan en este espacio. Otros animales más tímidos son la nutria, el meloncillo, el ciervo y el jabalí.
Es muy recomendable visitar los pueblos que conforman el Parque: Hornachuelos, Posadas, Almodóvar del Río y Villaviciosa de Córdoba. En ellos se podrá degustar los manjares serranos como el afamado chorizo de venado típico de la localidad de Hornachuelos.
No te puedes perder la visita de la Aldea de San Calixto
No te puedes ir de este maravilloso parque natural sin visitar la aldea de San Calixto, situada en el corazón de la Sierra rodeado de un magnífico bosque de encinas, alcornoques y quejigos. Se trata de un conjunto arquitectónico digno de admirar.
Desde que los monjes basilios fundaron aquí a mediados del siglo XVI el Monasterio de San Basilio del Tardón se ha visto ampliado por nuevas edificaciones entre los que destacan el Palacio del Marqués de Salinas, el Convento de las Carmelitas Descalzas y la Iglesia de Nuestra Señora de la Sierra, edificada sobre la antigua iglesia del monasterio. Aún viven entre las blancas paredes de esta aldea las monjas de clausura, que elaboran productos artesanales y que puedes adquirir a través del torno.
Por último, no podemos finalizar este apartado sin recomendaros una visita al Seminario de Nuestra Señora de los Ángeles, principalmente por su ubicación agarrada a las escabrosas y fragosas laderas que vuelcan al Bembézar.